miércoles, 3 de junio de 2020

Sonja Graf, la mujer que jugaba vestida de hombre



Nottingham 1936 Grupo con Graf y Menchik


   Sonja Graf sufrió una infancia durísima, fue maltratada por su propio padre y, aún así, encontró en las 64 casillas algo más que un juego, una tabla de salvación y de superación personal.







  






  Fué una mujer valiente que tuvo el arrojo y el atrevimiento de romper con las costumbres y modas de su época.
 Influenciada por la escritora francesa George Sand, conocida como la baronesa Dudevant, Graf empezó a vestirse como un hombre, sencillamente, como ella misma reconocía, para poder ser un poco más libre.

Sonja Graf y Max Eume

   Sobre el tablero Graf desplegaba un enorme talento, algo que no pasó desapercibido para el Dr. Eduard Dyckhoff, un experto jugador que logró ser campeón del mundo por correspondencia y
que se ofreció para ser su maestro, mostrándole así a la joven jugadora los principios posicionales del gran Siegbert Tarrasch, quien más tarde también se convertiría en su mentor.















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